20050626

Jane...

Abrió sus ojos y de inmediato supo que había despertado en una habitación que no era la suya. La incandescente claridad que embriagaba al lugar era muy diferente a la tenue luz que solía haber en el dormitorio de paredes azules en el que estaba acostumbrado a iniciar sus mañanas. En medio de su confusión, sintió la necesidad de levantarse para averiguar dónde estaba, mas no pudo salir de la cama: estaba atado a ella. “¡Auxilio!, ¡Sáquenme de aquí!, ¡Jane, ayúdame!”, comenzó a gritar tontamente como si las personas que lo tenían atrapado fuesen a entrar a liberarlo sólo porque él así lo quería. Entraron, por supuesto, pero no precisamente a complacerlo.

“¡Sujétenlo contra la cama!”, ordenó el más viejo de los seis hombres de blanco que irrumpieron en la habitación. Mientras daba instrucciones, preparaba –con una tranquilidad pasmosa- la dosis de fármacos que procedería a suministrarle al escandaloso individuo. “Ya va a venir Jane, ¡tranquilo!”, le dijo al pobre muchacho a medida que le iba inyectando el coctel de barbitúricos. Minutos después, los gritos de desesperación ya se habían desvanecido.

“¡Qué tristeza me da con él!, ¡tan joven y pasando por esto!”, dijo el sexagenario cuando se estaban retirando ya hacia la sala de descanso. “¡Todos los días se repite esta misma historia!”.

“¿Cuánto tiempo lleva aquí?”, preguntó Aaron, el menor y más nuevo de ellos.

“Como cuatro años, y en ese entonces David tenía veintiuno”, contestó uno de los que caminaba de primero y que había estado presente en aquella oportunidad. “Sus padres murieron meses después de que lo internaran aquí”.

“¿Y a quién llama con tanta insistencia?”, volvió a preguntar el novato.

“¡A Jane!”, le respondió el más alto de los enfermeros.

“Definitivamente, tú tienes la cabeza para que el cuello no te termine en punta”, le reprochó el viejo al de la respuesta obvia, y luego agregó dirigiéndose a Aaron: “Lo que el chico quiere saber es quién es esa Jane, ¿cierto?”.

“Sí, eso mismo: ¿quién es Jane?”, inquirió el joven enfermero.

El jefe lo miró a los ojos y le contestó: “Ese es el problema, ¡nadie lo sabe!”.

De saberlo, le habría dicho entonces que Jane era la chica con la sonrisa más bella que podría ver jamás. Que siempre olía a flores, como si durmiera en un lecho lleno de pétalos de rosas, y que cuando hablaba, realizaba unos gestos con las manos que te hechizaban por completo. Su voz era suave, y sus ojos brillaban tanto que era difícil no mirarlos. Le habría comentado también que por las mañanas, a Jane le gustaba leer poesía, pero sólo en los días pares. En los días impares de cada mes, ella, sin saber por qué, sólo lloraba. Jane había estado llorando el día en que Aaron la conoció.

Dar con la dirección de la casa donde la señorita vivía no le había sido nada fácil. Fue poco lo que pudo descubrir en los archivos del hospital, y menos aún lo que pudo averiguar con los demás enfermeros, que no sabían quién era ella; así que no le quedo otra que investigar sobre Jane con la única persona que, argumentablemente, la conocía.

Una mañana, David abrió los ojos y no tuvo tiempo ni de intentar levantarse: Aaron le tapó la boca con sus manos antes de que el paciente pensara siquiera en gritar. “¡No grites! Yo sólo quiero ayudarte a salir de aquí,” le susurró al oído el enfermero, “pero para eso tengo que averiguar quién es Jane”. No fue mucho lo que el investigador le pudo entender a David por el estado en el que lo tenían los sedantes, pero le pareció haber escuchado que el apellido de ella era “Ivanov” o algo parecido, y que vivía en la calle Madrid entre la 5ta y la 6ta, en una casa sin nombre.

Al contrario de lo que había imaginado, dar con la casa sin nombre había sido sencillo. Le abrió la puerta una bella joven con huellas de lágrimas en sus mejillas, a quien sin titubear le preguntó: “¿Eres Jane?”. “Sí”, respondió la mujer de la hermosa sonrisa, y amablemente lo invitó a entrar.

“Vengo de parte de tu amigo David. Necesita que lo ayudes a probar que no está loco”, le comentó Aaron.

“¿Qué David? Yo no conozco a ningún David. Casi no tengo amigos porque nunca salgo de casa”, le respondió ella.

“¿Cómo que no si él lo único que hace es preguntar por ti?”, insistió el enfermero.

“De verdad no sé de quién me hablas”, aclaró la chica del aroma a rosas. Aaron no podía dejar de verla a los ojos. “¡Qué maleducada soy!”, añadió ella, “no te he ofrecido nada de beber”.

“Estoy bien, gracias”, la tranquilizó él. “¿Me prestas el baño?”.

“¡Sí, claro!”, asintió la anfitriona. “Al fondo a la derecha”.

Y mientras Aaron se dirigía hacia la habitación que quedaba al fondo a la derecha, observó los retratos que adornaban el pasillo por el que caminaba. En todas las fotos aparecía un niño cada vez de una edad diferente, y en ninguna aparecía Jane. En la fotografía más reciente pudo reconocer que el niño era David. “¿Cómo que no sabes quién es David si lo tienes en todas las fotografías que están en el pasillo?”, naturalmente le preguntó a Jane de inmediato.

“¿Cuáles fotografías? En esta casa no hay fotografías porque a mi papá no le gustan”, contestó Jane. “Él dice que en cada foto que te tomas queda retenida una parte de tu alma.”

“Interesante teoría, pero ¿qué son entonces esos retratos que están allí?”, argumentó Aaron señalando a una de las fotografías.

“¿Dónde”, preguntó desconcertada la muchacha.

“¡Allí!”, le indicó el curioso joven prácticamente arrastrándola frente a uno de los cuadros.

“¡Ahí no hay nada!”, repitió Jane una y otra vez.

“La que debería estar en el hospital es ella”, pensó Aaron, y educadamente se despidió de la extraña chica y se disculpó por incomodarla con su insistencia. Fue directo al hospital, había algo raro en todo esto y estaba dispuesto a averiguarlo lo más pronto posible. En los archivos, descubrió que la dirección que aparece registrada como la de David era: calle Madrid entre la 5ta y la 6ta. Sorprendido, se dirigió entonces a la biblioteca del pueblo a ver qué encontraba sobre la familia Ivanov. En la hemeroteca, encontró un artículo de periódico que lo desconcertó por completo. El contenido de dicho artículo cambió su forma de verlo todo.

Velozmente, fue de nuevo a buscar a Jane, pero no había rastros de ella en toda la mansión. Las telarañas cubrían casi todos los muebles, incluidos los retratos. Todo estaba sucio, muy distinto a como lo había encontrado más temprano. Recorrió más de una vez las habitaciones del lugar y no encontró nada relativo a la chica. Aaron se negaba a creerlo, pero las pruebas eran contundentes. En ese instante, un escalofrío comenzó a recorrerle todo el cuerpo. De pronto, un ruido metálico y aterrador se esparció por toda la casa, y la poca luz que había en la habitación, se apagó por completo.

A la semana siguiente, cuando encontraron el cuerpo sin vida de Aaron tendido en el suelo, encontraron también la fotocopia de una reseña periodística en uno de sus bolsillos. La misma decía: “Padre desquiciado decapita a su hija y luego se suicida: Ibrahim Ivanov, quien mantenía cautiva a su hija en su mansión de la calle Madrid, asesinó anoche a su hija Jane, de 19 años, y luego se quitó la vida. El atormentado hombre, quien hizo su fortuna gracias a la fábrica de calzado que fundó, no dejó nota de suicidio.” El artículo fue publicado 50 años antes, el día 22 de Julio de 1955.

Canción para acompañar:

* Radiohead - "Creep".

Película recomendada de la semana:

* "Los Otros" (2001) [9/10] Director: Alejandro Amenábar. Cast: Nicole Kidman.

-¡Qué disfruten sobrevivir una semana más!

-H.G.

20050623

De cine

Continuando con las cadenas, he aquí la que faltaba:

Primera película que recuerdo haber visto:
- La primera película que me llevaron a ver en el cine fue: "Star Wars, Episodio VI (o III según el orden en que salieron): Return of the Jedi". Es del 83, así que supongo que yo tenía casi 2 años y que de allí salí fan de R2D2. Sin embargo, de aquella ocasión no recuerdo casi nada.
La primera película que vi y que en realidad recuerdo algo fueron "Los Goonies" (1985). Si quieren una película que me recuerde a mi niñez, es esta.


Última película que he visto:
- "Batman Begins". Superó mis expectativas. Es excelente. La recomiendo ampliamente (no tiene nada que ver con las 4 películas anteriores sobre el hombre murciélago).


Próxima película que voy a ver:
- Posiblemente sea Batman de nuevo, o "La Guerra de los Mundos", cuando la estrenen.


Cinco películas que veo muchas veces o que tienen un gran significado para mí:
- Eterno Resplandor de una Mente Sin Recuerdos (Eternal Sunshine of the Spotless Mind).
- Amélie.
- Perfume de Mujer (Scent of Woman) (Por alguna razón, siempre que la dan la veo de nuevo).
- 21 Gramos.
- Volver al Futuro I, II y III (Back to the Future) (Aquí hago trampa porque son tres).

Menciones especiales: Mi Pobre Angelito I y II (Home Alone), Garden State, El club de la pelea (The Fight Club), The Matrix (la primera nada más), la trilogía del Señor de los Anillos, Big Fish, Despertando a la vida (Waking Life), la Histioria Sin Fin (Neverending Story), Los Goonies, A Little Princess, Manos de Tijera (Edward Scissohands), y otras que no recuerdo en este momento.

-Le paso el testigo a cualquiera que desee seguir con esto.

20050618

Decisiones y consecuencias

Si tuviera que definir lo que es vivir, diría que no es más que tomar una serie de decisiones y afrontar sus consecuencias. Suena sencillo, pero está lejos de serlo.

Estas decisiones, para mí, pueden ser de dos clases: las relevantes y las que no lo son. En este último grupo califican aquellas que no cambiarán tu vida ni la de otros, como por ejemplo elegir cuál sabor de helado vas a pedir, cuál película verás en el cine y cosas por el estilo. En el primer grupo, en cambio, están aquellas decisiones que debes pensar al menos dos veces: las elecciones que afectan el curso de tu acciones directamente y que hasta podría decirse que son trascendentales. Estas son las disyuntivas para las que debemos tomarnos nuestro tiempo y considerar todos los factores pertinentes y todas las posibles consecuencias que esta elección podría acarrear, especialmente cuando afectan también a otras personas. A la hora de enfrentarse con una encrucijada de este tipo, es común cometer dos errores: tomar en cuenta únicamente al presente y no al futuro, y pensar que siempre tendrás una segunda oportunidad en caso de que te equivoques.

La opción que más te convenga ahora no necesariamente es la que más te beneficiará a futuro. Muchas veces es necesario sacrificar ciertas cosas ahora en aras de un mejor povenir. Sin embargo, la mayoría de las veces a las personas sólo les importa su futuro inmediato sin darse cuenta de que tal vez un poco de paciencia les premie mejor tiempo después. Yo prefiero atravesar por un presente dudoso con la esperanza viva de que el futuro será mejor, a vivir un presente decente pero con un porvenir incierto. El problema también está en que son muy raras las ocasiones en las que te das cuenta de que tomaste la decisión equivocada y aun estás a tiempo de retractarte. La mayoría de las veces, no hay segundas oportunidades para hacer una elección.

Por esta razón, es que debemos estar lo más seguros posible de lo que decidimos para poder mantenernos firmes ante las consecuencias. Si el camino no tiene vuelta atrás, no nos queda otra que llegar hasta el final y ver qué pasa. Es importante, no obstante, reconocer cuando nos equivocamos -preferiblemente a tiempo-, para que luego no cometamos el mismo error dos veces. El principal problema de mucha gente es considerar que todo lo que le sucede es culpa de la suerte, de los demás, del gobierno, o del zodíaco; y entonces esperan a que sus problemas se resuelvan también por factores externos. Lo que te acontece es consecuencia directa de tus acciones y sólo una pequeña parte es la que se ve afectada por el azar u otros actores. Si tu trabajo no te gusta, ¿averiguaste bien cuáles eran tus responsabilidades antes de aceptarlo? ¿Has hecho algo para mejorar tu situación laboral o esperas a que se mejore por ayuda divina? Si tu novio o novia te hizo daño, ¿realmente te tomaste el trabajo de conocer bien a esa persona y de lo que es capaz de hacer antes de embarcarte en una relación con ella? Y si lo sabías pero pensabas que la ibas a poder cambiar, ¿nunca consideraste la posibilidad de que no lograras cambiar a esa persona? Cuando las cosas no resultan, debes aceptar también tu parte de responsabilidad, ya que nadie te puso una pistola en la cabeza para que eligieras un determinado camino. Estabas consciente del riesgo que había cuando tomaste la decisión, y si no lo estabas, pues entonces obviamente no consideraste bien todos los factores.

Lo que estoy diciendo es que desde que nos valemos por nosotros mismos, somos lo que somos y estamos donde estamos a raíz de las elecciones que hemos hecho en nuestras vidas. Adónde iremos y en qué nos convertiremos depende también de los caminos que tomemos de ahora en adelante. Deja de culpar a todo lo que te rodea de lo que te sucede y verás que todo comenzará a irte mejor. No digo que factores externos como la política no tengan cierta influencia en lo que nos ocurre, pero básicamente la responsabilidad principal está en nosotros mismos. Piensa bien todo lo que hagas, toma en cuenta cómo se verán afectadas otras personas, no tomes una decisión si no estás dispuesto a soportar las consecuencias, especialmente cuando todo sale mal, y no tengas miedo de equivocarte, porque es de los errores que aprendemos. Ten miedo, más bien, de no querer equivocarte, porque esto puede hacer que dejes pasar grandes oportunidades.

P.D: De música de fondo, se pueden escuchar fragmentos de canciones de Something Corporate. Es sólo temporalmente, ya que no me gusta mucho la calidad del sonido (tuve que reducirla para que no resultase un archivo muy pesado), así que no se asusten aquellos a los que les gustaba más la melodía anterior.


Canción para acompañar:

* Coldplay - "Fix You".

Película recomendada de la semana:

* "Karakter" (1997) [8/10] Película Belga-Holandesa ganadora del Oscar de ese año.


-¡Qué disfruten sobrevivir una semana más!

-H.G.

20050611

Ranas de Papel

Por las noches, me gusta que llueva, porque así puedo dormirme escuchando caer las gotas de agua. Una tras otra, rítmicamente, como si bailasen una canción que sólo ellas escuchan. Me relajan y también me dan una sensación de bienestar al hacerme saber que estoy seguro en la comodidad de mi cama y no mojándome en la intemperie. Algo parecido sucede en la ducha, cuando cierro mis ojos para oír con detenimiento al sonido que produce el agua al golpear contra mi cabeza – grande, dura y sospecho que hueca-, porque siento que podría quedarme todo el tiempo del mundo nada más escuchando… sólo escuchando.

Cuando estoy en un sitio oscuro donde por algún lado se filtre un rayo de luz, me gusta reflejarlo con mi reloj y proyectarlo contra alguna pared o con lo que es mejor: contra el rostro de otras personas. “¡Si eres infantil, Horacio!”, me dicen cuando les encandilo los ojos, y tal vez lo sea, pero el que piensen eso no me va a impedir disfrutar de jugar con estas luciérnagas de mentira. Lo mismo sucede cuando cae entre mis manos una cuerda con cualquier objeto sujetado al otro extremo, porque no puedo evitar girarla una y otra vez. Es infantil, lo sé, pero me divierte hacerlo. De niño creía que si rotaba la cuerda muy muy rápido, podría de pronto salir volando como si fuese un helicóptero. Nunca lo logré, lo que me hace sospechar que esto no es posible, pero pasé muy buenos ratos intentándolo.

También me ganaba el calificativo de infantil cuando estaba en alguna clase aburrida y había una hoja de papel en mi poder, porque me ponía a hacer ranitas de origami. ¿Qué puede entretener más que un batracio de papel brincando en tu puesto? Apuesto a que los que me veían con desdén por parecer retrasado en el fondo se morían de ganas por hacer saltar a la rana ficticia. Hacer aviones igual me agradaba, sobretodo verlos volar – en realidad, ver volar cualquier cosa me gusta: pájaros, frisbees, etc.-, pero la desventaja de estos es que no son muy fieles. Las ranas siempre permanecerán cerca de ti, mientras que los aviones casi siempre aterrizarán lejos de tu puesto.

Caminar en la orilla de la playa mojándote los pies, comerte la mezcla de una torta mientras la preparan –o la masa para hacer galletas-, empujar levemente una silla cuando alguien se va a sentar para que se asuste creyendo que va a caerse, poner varias piezas de dominó una tras otra y hacer caer a la última, ver al cielo un día despejado, lanzarse por una pendiente sobre una caja de cartón, asustar o hacer reír a alguien, obsequiar algo que sabes que a la otra persona le va a gustar, lanzarse por un tobogán de agua, hacer intencionalmente algo trivial que sabes que molesta a otro, jugar con legos, hacer figuras con la sombra de tus manos en una pared, y otras cosas más que seguro olvido son sólo ejemplos de cosas sencillas que hacen que tu vida sea más amena.

Y es que para entretenerse no es estrictamente necesario contar con algo sofisticado. No digo que no la puedas pasar muy bien con un iPod o algo igual de avanzado; pero muchas veces con las cosas más sencillas puedes lograr el mismo objetivo. Sólo hace falta un poco de imaginación…

P.S: La música que suena de fondo es Childhood (1) de Yann Tiersen y pertenece al soundtrack de la excelente Good Bye Lenin (Yann Tiersen es el mismo que compuso la música para Amélie). Si les molesta la música, presionen donde dice "Silent Movie" debajo del header y dejará de sonar.

Canción para acompañar:

* July for Kings - "Normal Life".

Película recomendada de la semana:

* "Finding Neverland" (2004) [10/10] Director: Marc Foster Cast: Johnny Depp, Kate Winslet, Freddie Highmore, Dustin Hoffman.

-¡Qué disfruten sobrevivir una semana más!

-H.G.

20050610

El riesgo de no tomar riesgos

"Si todo fuese fácil, nada valdría la pena", suelo pensar yo.

"Es como un toque de picante que tienen las cosas difíciles que hacen que uno sienta más satisfacción al lograrlas que con las cosas fáciles", me comentó en cierta ocasión una amiga.

Y me dejó pensando: "Si lograr lo difícil nos satisface más, ¿por qué siempre resulta tan tentador tomar el camino fácil, o lo que muchas veces es lo mismo: el camino seguro?" Tal vez sea porque le tememos a los riesgos. Si bien es cierto que la vía complicada es la que, potencialmente, más recompensas nos depara; también es cierto que es la que más riesgos involucra.

Particularmente, nunca le he tenido miedo a arriesgarme; eso sí, siempre y cuando exista una posibilidad real de que las cosas salgan a mi favor. Lo que sucede es que por más dolorosa que sea la caída si fracasas, es mucho más sencillo levantarse nuevamente que superar la incertidumbre de no saber que hubiese pasado de haber tenido el valor de correr ese riesgo. Pocas veces se prensenta la oportunidad de tomar esa decisión nuevamente. En cierto modo, es como ir a un casino y tener la corazonada de que si apuestas al 8 negro en la ruleta vas a ganar. El camino fácil y seguro es ahorrarte el dinero y no apostar nada, mas nunca sabrás qué hubiese pasado de haber seguido a tu instinto. Si en cambio decides jugar, puedes tanto perder como ganar, pero no te quedará la duda, que es lo que más inquieta. Al final todo se reduce a determinar si lo que podrías obtener es tan valioso como lo que podrías desperdiciar, y qué tan factible es obtenerlo. Lo mejor de todo es que en la vida real, esa factibilidad no depende tanto del azar como en el caso de la ruleta, sino en el esfuerzo que nosotros mismos le pongamos a lo que hacemos y a otros factores más tangibles. Lo cierto es que si nunca apuestas, nunca vas a perder, mas... ¿qué emoción tiene llevar una vida así de insípida? El mismo hecho de atreverse ya le da un poco de sazón a la vida.

Muchas veces, es necesario enfrentarse a la posibilidad de perder mucho para poder contar con la oportunidad de ganar en grande, y esto, mis amigos, aplica en todas las facetas de nuestras vidas.

- "Amar es arriesgarse a no ser amado. Tener esperanza es arriesgarse a sufrir. Tratar es arriesgarse a fallar, pero los riesgos deben ser tomados porque el peligro más grande en la vida es no arriesgar nada" [Anónimo]

- "Si no estás dispuesto a arriesgar lo inusual, tendrás que conformarte con lo ordinario" [Jim Rohn]

- "Aquel que se arriesga y falla puede ser perdonado. Aquel que nunca se arriesga y nunca falla es una falla en sí mismo" [Paul Tillich]

- "No es debido a que las cosas son difíciles que no nos atrevemos a hacerlas. Es debido a que no nos atrevemos a hacerlas que ellas son difíciles" [Séneca]

Canción para acompañar:

* Switchfoot - Dare you to move
* 7th Standard - You Decide (versión acústica)

Película recomendada:

* "Sideways" (2004) [8/10] Director: Alexander Payne. Cast: Paul Giamatti, Thomas Haden Church, Virginia Madsen.

-H.G.

20050604

Un Paseo en Motocicleta

"Summertime and the wind is blowing outside in Lower Chelsea
And I don't know what I'm doing in the city
The sun is always in my eyes
It crashes through the windows
And I'm sleeping on the couch
When I came to visit you
That's when I knew that I could never have you
I knew that before you did
Still I'm the one who's stupid
And there's this burning, like there's always been
I've never been so alone
And I've never been so alive

Visions of you on a motorcycle drive by
The cigarette ash flies in your eyes and you don't mind
You smile
And say the world doesn't fit with you
I don't believe you
You're so serene
Careening through the universe, your axis on a tilt
You're guiltless and free
I hope you take a piece of me with you
And there's things I'd like to do that you don't believe in
I would like to build something
But you'll never see it happen
And there's this burning, like there's always been
I've never been so alone, and I've never been so alive

[break]

And there's this burning, there is this burning
Where's the soul, I want to know
New York City is evil
The surface is everything, but I could never do that
Someone would see through that
And this will be the last time we'll be friends again
And I'll get over you and you'll wonder who I am
And there's this burning, just like there's always been
I've never been so alone alone
And I've and I've never been so alive
So alive

I go home to the coast
It starts to rain
I paddle out on the water, alone
Taste the salt and taste the pain
I'm not thinking of you again
Summer dies and swells rise
The sun goes down in my eyes
See this rolling wave
Darkly coming to take me home
And I've never been so alone
And I've never been so alive"

Lo anterior es la letra de mi canción favorita: "Motorcycle Drive By" de Third Eye Blind. Todavía recuerdo la primera vez que la escuché un día de 1998, el mismo día que compré el disco. El cual, dicho sea de paso, no me fue nada fácil de encontrar. Compré el álbum por “Semicharmed Life”, canción que pegaron bastante y que estoy seguro de que han escuchado aunque no les suene para nada el nombre, y por una o dos canciones más que había oído. Por eso fue una muy grata sorpresa para mí cuando en la pista número 13 comenzó a sonar la canción con la que comienzo este post.

En esa época, estaba comenzando la universidad y me estaba adaptando a vivir en una nueva ciudad lejos de casa. Más de una vez me permitió este disco distraerme y superar la nostalgia de aquellos primeros días. Ahora cuando lo escucho, recuerdo también las sensaciones de entonces. Vivo de nuevo en 1998.

Lo maravilloso de la música –además de marcar una época en tu vida-, es que tu percepción de la misma puede cambiar con el paso del tiempo y particularmente en lo que a la letra respecta: la interpretación que le des puede ser diferente cada vez que la escuches. Especialmente si tu artista preferido es un compositor de verdad y no un especialista en mercadotecnia. Confieso que al principio, “Motorcycle Drive By” me gustaba más que todo por el aspecto musical -lo que decía la canción para mi era cualquier cosa-, pero con el paso del tiempo y a medida que he madurado, me he quedado encantado más y más con el contenido de la canción. Tal vez sea porque ahora sí puedo identificarme con ella.

Stephan Jenkins, vocalista y líder del grupo, escribió esta canción a partir de unas notas que hizo en su diario. Trata sobre una amiga de la que él estaba enamorado pero que no sentía lo mismo por él. Stephan sabía que no tenía esperanzas y por eso cuando la iba a visitar a Nueva York (él es de San Francisco), se sentía tan sólo pero al mismo tiempo tan vivo. Al final él sabe que lo superará todo y que tal vez hasta sea lo mejor para él que las cosas ocurran de ese modo (no se lleva bien con el ambiente neoyorquino), pero igual no se arrepiente de haberse enamorado de ella porque sentir eso que lo quemaba por dentro le permitió darse cuenta de lo vivo que estaba. La gente le teme muchas veces a sufrir, pero no deberían, porque una vez superado el dolor (que siempre se supera), terminan siendo mejores personas de lo que eran al principio; porque, lamentablemente, la gente aprende de las caídas mas no de los triunfos. ¿Quién no ha pasado por algo al menos ligeramente parecido?

Yo soy de los que piensa que no existe tal cosa como buena ó mala música (ni siquiera la de Britney), sino que simplemente existe lo que te gusta y lo que no, por lo que debemos respetar los gustos de cada quién. Así que, no importa si prefieres la salsa, el jazz, la cumbia, el rock, el punk, el flamenco, la música barroca, la lambada o la macarena; busca algo que te guste escuchar más que cualquier otra cosa y conviértelo en algo tuyo –mi consejo es que sea algo con una buena letra pero no es imprescindible-; y verás que con el tiempo cada vez que lo escuches disfrutarás de experimentar de nuevo ese carrusel de emociones que alguna vez sentiste.
De verdad siento pena por las personas que dicen que no les gusta la música de ningún tipo. ¿A quién podría no gustarle un paseo en motocicleta?

P.D: Stephan Jenkins produjo y escribió algunas canciones del último disco de nu novia actual: Vanessa Carlton. Se nota la diferencia respecto al disco anterior. Chequeen la letra de White Houses.

P.D: Hoy fue día de 2x1.

P.D: Esta semana le fue detectada leucemia a Andrew McMahon, vocalista y líder de Something Corporate. Sin embargo, los médicos esperan una total recuperación. ¡Esperemos que sí!

Dedicado a Mariú, quien por alguna razón se empeñó en que escribiese algo sobre música. Espero haber llenado tus expectativas!

Canción para acompañar:

* Es obvio cuál.

Película recomendada:

* "Les Choristes" (2004) [11/10] Director: Christophe Barratier. Cast: Gérard Jugnot.

-H.G.

En el cielo

El retrato de algún famoso para él desconocido colgaba de una pared distante. El sonido de los granos de maíz emocionados por salir de la caldera reinaba en el ambiente. Todos en la cola estaban atentos al momento en el que se abrieran las puertas de la sala para poder entrar. Él no... Él solamente estaba atento a ella.

Le maravillaba que esa chica pareciera absorta en otro mundo, lleno quizás de aves de colores y bailarinas mágicas; y también que de vez en cuando mientras hablaba sola se emocionaba pensando en quién sabe qué cosa. “¡Es de otro mundo!” dijo para sí él cuando, de pronto, la gente comenzó a entrar al recinto donde se proyectaría la película. En medio de la confusión la perdió de vista, por lo que se resignó a no volverla a ver y a buscar dónde sentarse. Le desagradaban los extremos, razón por la cual buscó un puesto en el medio, ni muy arriba ni muy abajo, ni muy a la derecha ni muy a la izquierda, sencillamente en el medio. Fue un milagro que lograse sentarse sin derramar una sola gota de su bebida mas no pudo evitar que se le cayeran unas cuantas golosinas. Aun se estaba acomodando en su silla cuando escuchó a alguien preguntarle: “¿Está ocupado ese asiento?”. Para su sorpresa era ella, y sin saber cómo, encontró la manera de responderle que estaba libre.

La joven de otra galaxia se sentó entonces a su lado. Tenía mucha gracia y estilo, de eso se había percatado él desde el principio y lo confirmaba ahora mientras la veía ponerse cómoda en su asiento a la vez que en su mente sonaba una y otra vez una canción de Goo Goo Dolls. La función estaba a punto de comenzar, pero en ese momento a él le importaba poco si no empezaba nunca.

De reojo, una vez iniciada la película, él la observaba calladamente. Ella tenía su cabeza inclinada un poco hacia delante y los ojos bien abiertos, como para no perderse ningún detalle de lo que ocurría en la pantalla. De lo que él no se perdía ningún detalle era de lo que ocurría a su lado, porque no podía dejar de mirarla. Inclusive cuando ella se levantó para ir al tocador él la observó alejarse y le dio risa que sin querer pisara a una señora unos cuantos puestos más a la izquierda. Aún cuando cometía una torpeza, la chica conservaba intacta su gracia. “¿De verdad todo es tan perfecto?”, se preguntaba incrédulo el joven mientras ella estaba ausente. Algo debía estar mal, porque a él no se suponía que le pasaran estas cosas. “¿Será que morí mientras dormía y ahora estoy en el cielo?”, pensó, y decidió entonces averiguarlo contando los números sin respirar: “Uno, dos tres…, ocho, nueve, diez…, diecinueve, veinte, veintiuno, ¡Ya!”, dijo mentalmente. Se alegró de haberse quedado sin aire, porque eso significaba que aun estaba vivo, todo era real. Mas no había terminado de asimilarlo cuando regresó la causa de su estupefacción. “¿Me perdí de algo bueno?”, le interrogó apenas se sentó, pero él no sabía la respuesta: había estado demasiado concentrado en averiguar si estaba vivo como para saber qué había ocurrido en la película. “No, nada”, fue lo único que se le ocurrió decirle, y ella se limitó entonces a darle las gracias.

Y la canción de Goo Goo Dolls sonaba ahora más fuerte en su cabeza. Y la imagen de ella seguía formándose cada vez más frecuentemente en su retina. Todo continuó de la misma forma el tiempo que duró la proyección. Él estaba consciente de que si quería saber lo que ocurría en la película tendría que volverla a ver otro día.

Cuando acabó todo, ella se levantó de su sitio para dirigirse hacia la salida. Él la siguió poco después. La acompañó todo el tiempo en el que sus caminos fueron paralelos, mas no tuvo más remedio que verla partir cuando tomó un rumbo totalmente diferente al que él debía tomar. Pronto la dama desapareció, y él tuvo que conformarse con observar la imagen de ella que le había quedado grabada en la memoria. Estaba vivo, ahora más que nunca se daba cuenta... pero no había estado en el cielo después de todo.

Canción para acompañar:

* Goo Goo Dolls - "Iris"

And I'd give up forever to touch you
'Cause I know that you feel me somehow
You're the closest to heaven that I'll ever be
And I don't want to go home right now

And all I can taste is this moment
And all I can breathe is your life
'Cause sooner or later it's over
I just don't want to miss you tonight

And I don't want the world to see me
'Cause I don't think that they'd understand
When everything's made to be broken
I just want you to know who I am

And you can't fight the tears that ain't coming
Or the moment of truth in your lies
When everything feels like the movies
And you bleed just to know you're alive

And I don't want the world to see me
'Cause I don't think that they'd understand
When everything's made to be broken
I just want you to know who I am

Película recomendada:

* "Spanglish" (2004) [9/10] Director: James L. Brooks. Cast: Adam Sandler, Tea Leoni, Paz Vega.

-¡Qué disfruten sobrevivir una semana más!

-H.G.

20050602

De cadenas y eslabones

He sido víctima de una cadena, sólo que esta es una cadena a través de blogs y no por e-mail. Sin embargo, es bastante interesante como para hacer lo que siempre hago con las cadenas: romperlas, por lo que esta vez sí la voy a continuar. Además, quien me la dejó, thegreenfly, me cae bien, así que... ¿por qué no hacerlo?

Cadena Literaria:

1. Estás atrapado en Fahrenheit 451, ¿qué libro te gustaría ser?:
- Uno hecho con metal para no quemarme (Fahrenheit 451 trata sobre una sociedad que considera malignos a los libros y por eso los quema).

2.¿Alguna vez te enamoraste de algún personaje de ficción?:
- Si se vale un personaje de una película, entonces de Sara Crewe, la protagonista de "A Little Princess". Esta película está basada en un libro pero nunca he podido leerlo.

3.¿El último libro que compraste fue?:
- "Hotel New Hampshire" de John Irving.

4.¿El último libro que leíste fue?:
- "A Prayer for Owen Meany" de John Irving.

5.Cinco libros que llevarías a una isla desierta:
- El "Manual de Supervivencia en Islas Desiertas".
- "El Mundo Según Garp" de John Irving (mi favorito).

- "El Guardián entre el Centeno" (The Catcher in the Rye) de J. D. Salinger.
- "A Prayer for Owen Meany" de John Irving.

- "Por quién doblan las campanas" de Ernest Hemingway.
- "Moby Dick" de Melville, para las noches de insomnio (es bueno, pero apenas leo una página me da sueño).

6.¿A quién le pasas el bastón y por qué?
- A la persona que está leyendo esto en caso de que no haya llenado esta cadena (no importa si no tiene un blog, puede hacerlo en los comentarios).

Cadena Musical:

1. Tamaño total de los archivos de música de mi computadora:
- No se exactamente, pero son unos cuantos gigas.

2. Último disco que compré:
- Compré al mismo tiempo vía electrónica: "Comfort in Sound" de Feeder. "It's all in your head" de Eve 6. "Sleepwalker" de Radford. "Parachutes" de Coldplay y el soundtrack de "Garden State". Están por lelgarme unos nuevos, entre ellos el último de Collective Soul, "Youth", que es el que me falta para tener la colección completa de ellos.

3. Canción que escucho en este momento:
- "Tired of You" de The Exies, "Globes and Maps" de Something Corporate, "Hands on Deck" de Waking Ashland y "Our Last Night"y "Breathless" del nuevo disco de Better Than ezra.

4. Canciones que escucho mucho o que tienen algún significado para mí:
- "Semicharmed Life" y "Motorcycle Drive By" de Third Eye Blind. "Fly" de Radford. "The World I Know" de Collective Soul. "Mr Jones" de Counting Crows. "Acoustic #3" y "Iris" de Goo Goo Dolls. "Life" de Our Lady Peace. "Be Like That" de 3 Doors Down. "Eleanor Rigby" de The Beatles. "Feels Like Home" de No Use For A Name. "Walking By" de Something Corporate. "Fake Plastic Trees" de Radiohead. "Don't Speak" de No Doubt. "When You're Gone" de The Cranberries (me recuerda una buena época), "1979" de Smashing Pumpkins, "Closer" de Better than Ezra, "The Open Road Song" de Eve 6, "Adam's Song" de Blink 182, "Voy a pasármelo bien" de Hombres G (otra que me recuerda una época), "It's Over Now" de Neve, "You're a god" de Vertical Horizon, y sé que olvido muchas más pero ya está bueno.

5. Personas a las que les paso el testigo:
- Idem a la cadena literaria.

Nota: Esto no sustituye el post del fin de semana. Es más, es posible que este fin haga 2.

-H.G.