20051029

El Día Después

Sus manos llenas de sangre y su memoria completamente vacía. Así se halló al abrir los ojos cuando ya era mediodía. No comprendía cómo ni por qué se encontraba en medio de una calle cualquiera en semejante estado. "Todavía debo estar soñando", se dijo a sí mismo en un fútil intento por mantener la calma, pero por más que se estrujaba los ojos, seguía viendo todo igual. Estaba bien despierto, sin duda, por lo que más le valía averiguar qué había pasado.

Se levantó del piso y notó que los harapos de lo que parecía ser un disfraz de vampiro también se encontraban ensangrentados. Sin embargo, nada le dolía. Examinó su cuerpo del pecho hacia abajo con detenimiento y al parecer no tenía ninguna herida. "¿Por qué estoy bañado en sangre si no siento estar herido?", se preguntó entonces, y sólo le vino a la mente una respuesta plausible: la sangre no era suya. ¿De quién era entonces?

Intentó pedirle ayuda a una señora que venía caminando en dirección suya, pero ésta apenas al verlo salió corriendo despavorida como si hubiese visto a Satanás en persona. "¡Seguramente piensa que voy a robarle!", pensó Jonás, y decidió que era mejor buscar socorro en alguien menos propenso a asustarse.

Se dirigió entonces a una esquina y vio que cerca había una estación de gasolina donde se encontraban unos camioneros. “¡Por favor, ayúdenme, no sé dónde estoy ni qué me ha pasado!”, les gritó ingenuamente el muchacho al irse acercando, pero estos también huyeron con miedo cuando lo observaron venir. “¿Los camioneros también temen que les robe? ¡Esto sí que es extraño!”, exclamó Jonás e intentó perseguirlos para explicarles que no era su intención despojarles de sus pertenencias.

El joven corría por la calle y miraba con estupefacción cómo todo el mundo salía espantando al verlo a él. “¿Qué es lo que pasa? ¿Por qué me temen?”, les interrogaba el muchacho, pero cuando lo hacía ya todos estaban muy lejos como para escucharle. Sintiéndose totalmente sólo, deambuló por las calles del pueblo hasta que poco antes del crepúsculo, en un bote de basura halló algo que explicaba gran parte de lo que sucedía. Había encontrado un periódico con el siguiente titular: “Cincuenta personas asesinadas en fiesta de Halloween”.

Jonás comenzó a leer la noticia sobre un hombre que pierde la razón y con un arma automática comienza a dispararle a todos los presentes en una fiesta de Halloween y luego escapa, pero un sentimiento de culpa no le permitió continuar con la lectura. No necesitaba leer más para confirmar una suposición que en el fondo de su mente había comenzado a formarse algunas horas atrás: había cometido un terrible crimen y por eso su vestimenta estaba impregnada de una sangre que no era la de él.

Recordaba haber asistido a una fiesta de Noche de Brujas el día anterior, pero a partir de allí todo estaba en blanco para él. Si él nunca en su vida había sentido instintos asesinos, ¿cómo pudo ser capaz de algo tan atroz? En su sano juicio, estaba seguro que nunca jamás habría hecho algo así, mas… ¿de qué le sirve esto ahora? Cuerdo o no, le había desgraciado la vida a muchas personas y ya nada podía hacer para remediarlo. ¿Cómo iba a poder verle la cara de nuevo a sus seres queridos? Ya la gente huía de él cuando lo veían. ¿Cómo podría vivir sabiéndose culpable de tan penoso crimen? Entonces una idea fatal cruzó por su mente. Estaba seguro de que no iba a poder vivir así.

Subió hasta la azotea de uno de los edificios cercanos y se acercó al borde, cerró los ojos, y pidiendo perdón en su alma se lanzó al vacío. La caída duró fracciones de segundo, pero a él le parecieron una eternidad. Un estremecimiento en todo su cuerpo sintió al impactar contra el suelo, pero no sintió dolor. “¡No es tan desagradable morir después de todo!”, pensó mientras yacía inmóvil en el suelo, y fue entonces cuando abrió los ojos y se dio cuenta de que su intento suicida había fracasado. “¿Será que un espíritu maligno se apoderó de mí y me hizo cometer ese crimen además de concederme poderes sobrenaturales?”, se preguntó Jonás incrédulo, y luego se levantó del suelo y se acercó hasta un automóvil que estaba parqueado cerca para intentar ver su reflejo en el espejo retrovisor. En el sitio donde había caído, sólo quedaba un poco de sangre y los restos de algo que prefirió no indagar mucho qué era.

Al ver el reflejo de su rostro en el espejo del auto, notó que estaba pálido y que en su cráneo había unos orificios del diámetro de una bala y donde asomaban parte de sus sesos. Anonadado, se echó al suelo y comenzó a llorar de desesperación. Acababa de comprender lo que realmente había sucedido. Él no era el asesino de Halloween; él había sido una de sus víctimas.


Canción para acompañar:

* Sleeping at Last - "Brightly".

Película recomendada de la semana:

* "Corpse Bride" (2005) [7.5/10]. Director: Tim Burton. Cast: Johnny Depp, Helena Bonham Carter.

-¡Qué disfruten sobrevivir una semana más!

-H.G.

11 comentarios:

ベル dijo...

Me encantó, me encanta este tipo de finales en los cuentos :D


Un beso H.G.



Y sip, buen consejo, trataré de sobrevivir, pero al domingo ;)

Mariu dijo...

Creo que no encuentro palabras para describir mi expresión al terminar de leer esto, esta vez no te la adiviné, quedé en shock, está muy,muy bueno, excelente (para no perder la costumbre). Sé que piensas que no son publicables, pero bueno, podrías hacer una recopilación de todos y hacer un muy buen regalo ;)

Saludos!!

Patricia Viviana Chiquinquira Ferrer Mavarez dijo...

Hola Horacio, me gusto mucho mucho la historia, me encanta este género de suspenso-terror en ti, no sé pero desde que empece a leerla sabía que iba a terminar así, tal vez soy vidente broma. Espero conectarme pronto para pelear es que digo hablar contigo cuidate

Ana Sofía dijo...

Hey que buena historia. El viernes vi Corpse Bride. Fue chévere. Saludos.

H.G. dijo...

Muchas gracias a todas por sus positivos comentarios. Me alegra mucho que les haya gustado la historia.

Un abrazo!

Ceci dijo...

Por supuesto que nos gustó. De ti ya no esperamos menos. De hecho, tus gustos cinematográficos hablan por sí solos. Ya has visto alguna de las de la lista?

nocheoscura dijo...

Muy bueno. Gracias por el link.

Anónimo dijo...

HG,
Estoy con Mariu. Recopila, guarda y aguarda a que vean la luz. Lo merecen.

¿Sabes que todavía no sé como se te pudo ocurrir el comentario que me dejaste sobre RApunzel?, ¡Qué bueno!

H.G. dijo...

ceci: Muchas gracias ceci. De la lista solo he visto Corpse Bride y no me decepciono. Si no la has visto, te la recomiendo. Un abrazo!

nocheoscura: gracias. De nada.

nostak: Gracias por el consejo. Guardados estan. Lo dificil es que alguien de cualquier editorial quiera que vean la luz. Si se me presenta la oportunidad, con mucho gusto lo hare, pero no es algo que busque con mucho ahinco. Que bien que te haya gustado ese comentario!

Saludos desde este lado del mundo.

Artehaga dijo...

ja,ja,ja,ja,ja,ja. Qué bueno que estuvo, deberías lanzarte a la fama en un intento suicida, como al personaje de tu cuento lo máximo que te puede pasar, es que descubras que no te mataste en la caída!!!!

EduardoEquis dijo...

JE! veia venir semejante final, pero no importa, siempre uno lo disfruta. Fascinante, sorprendente y un poco oscuro. COmo me gustan!

Saludos!